Artículo sobre la obra de Friedrich  Durrenmatt

La visita de la vieja dama

La obra comienza en la estación de tren de Gullen, ciudad de Europa Central en tiempos de post-guerra y que en tiempos pasados vivió épocas de gloria.

El autor nos retrata una sociedad en decadencia. Un pueblo que había vivido en la abundancia y en esos momentos estaba ruinoso y desmantelado. Nos muestra lo más podrido del ser humano y hasta dónde puede llegar por dinero.

Al llegar Clara a la ciudad cargada de dinero, pensaron en lo que ella podría hacer en ella, pero no imaginaban que lo que a Clara le removía por dentro. Era la venganza y solo quería comprarlos, para cometer lo que ella misma no era capaz de hacer.

Aunque el autor no relata cómo pudo hacer Clara su fortuna, se puede pensar, que fue prostituyéndose, pero eso no le importa a nadie, cuando  dice que quiere donar mil millones por la muerte de Alfredo, el cual fue culpable de su salida de la ciudad y no quiso reconocer al hijo que esperaba.

Es un relato muy duro y lleno de rencor por parte de Clara, cosa que a los habitantes de Gullen no les gustó y tuvieron sus discrepancias. Pero el dinero los cegó y la ambición se apoderó de ellos, ocasionando una confrontación, con todos y cada uno de sus habitantes, hasta que consiguieron la muerte de Alfredo.

Ellos mismos se convencieron de que habían hecho lo correcto.

En esta obra, el autor se adelantó a su tiempo, porque aunque haya pasado un tiempo está en pura actualidad.

Nos muestra una ciudad abandonada y a unos habitantes esperanzados ante la visita inesperada de Clara, y sus millones. Cuando alcanzan a comprender la petición que encierra la donación del dinero, se escandalizan y no quieren hacer trato, pero ahí comienza el dilema y entran en una espiral de hipocresía y actitudes grotescas, cosa que hoy en día está vigente en nuestros días.

Es una historia de muerte y venganza, pero la fuerza del dinero hace, que poco a poco todos los habitantes de la ciudad, desde los más notables, hasta los más humildes, se conciencien,  que Clara tiene razón en tomarse la justicia por su mano.

Al leer el texto, entra un poco de pena. Es una historia cruel y llena de venganza, pero comprendes que hoy en día todo se puede conseguir con dinero. La justicia se compra, en esos años y ahora también. Impacta mucho que al final la persona que tenía que morir se conciencie de ello, pensando que es lo mejor para la ciudad y todos los habitantes quedan excluidos de culpa dentro de ellos. No sienten remordimientos y todos los prejuicios que tuvieron al principio se desvanecen ante el color del dinero, pensando que la venganza es legítima, por todo el daño que este hombre le causó en su vida.

Me ha encantado la forma de relatar la historia. La forma de tratar a la justicia tan irónicamente, dando a entender que cuando hay dinero por delante, no hay justicia, solo venganza y ambición. Es un relato muy crudo, pero se puede estar viviendo en la actualidad, en cualquier lugar de este mundo.

María López Moreno.