Antes de que se asentara el culto de Apolo en Delfos, reinaba Gea, divinidad femenina que simbolizaba a la Tierra. El Dios de Delfos era Apolo, dios griego y romano del sol, la poesía y la música. Platón pone en boca de Sócrates la sentencia de Delfos: «Conócete a ti mismo», en su diálogo con Alcibíades, un joven ignorante que aspira a dedicarse a la política. Sócrates le recuerda a Alcibíades, que antes de ser gobernante, su primera tarea como hombre, debe ser el gobierno de sí mismo y no lo conseguirá si antes no se conoce.
Conocerse a sí mismo, permite saber lo que queremos en la vida, ya sea en grandes proyectos o en el día a día. También permite gestionar mejor nuestras emociones, incluso en las situaciones más difíciles. Por este motivo, es esencial conocernos. A través de nuestras emociones tenemos acceso a un conocimiento realmente valioso sobre nosotros mismos, ya que representan una parte fundamental de nuestra identidad y nos sirve de guía para lograr nuestra propia felicidad…
Muy interesante, la reflexión, Lucía.
Buenísima reflexión y nos transporta a la mitología.Un abrazo.
Muy buena reflexión, digna de una alumna de Platón. As buceado en el sitio mas profundo del hombre, en su yo interior.
¡Felicidades Lucia!