Las hojas caen lentamente
alfombrando los caminos,
bordando con sus colores
de oro, ocre y amarillo.
Relucen atardeceres
perdidos en el horizonte
y unos ojos con tristeza,
rememora sus colores.
Y los corazones laten
y se encuentran afligidos,
porque cuando caen las hojas
ellos, se sienten perdidos.
Y puede que alguna lágrima
le resbale la mejilla,
recordando otro otoño
en su corazón partido.
María López Moreno
Que bonito Mari. Enhora buena