La muñeca rota…

Yo era una muñeca bonita. Mi pelo rubio y mis ojos azules llamaban la atención. Pero un día se me rompió el brazo y mi dueña me abandonó en este lugar. ¡No veo nada! A veces pienso que no tengo ojos, pero sí, están aquí, me los toco. Estoy dentro de un armario, tapada con un montón de cosas y nunca me ve. La echo de menos, porque era una niña cariñosa y me mimaba mucho. Ahora siento tristeza y estoy desesperada. Tengo miedo de no poder salir nunca de aquí. Estoy llena de ira, porque mi amiga juega con otras muñecas nuevas y no se acuerda de mí. Antes, estaba orgullosa conmigo y ahora le doy asco. Tengo que hacer algo para llamar su atención. ¡Ya sé lo que voy a hacer! Cuando se acerque al armario donde estoy sacaré mi voz y al escucharme, se acordara de mí y entonces, buscará entre todos los juguetes y me verá y me rescatará de mis miedos. Y yo sentiré alegría, cuando vea su cara de sorpresa al verme y escuche su voz llamándome y sus manos, acariciándome mi pelo rubio. Mi único anhelo es, que me arregle mi brazo roto y juegue conmigo como antes lo hacía. Entonces, volveré a ser feliz.

 

María López Moreno.

 

 

5 comentarios sobre “La muñeca rota…

  1. Maria, me ha gustado mucho tú muñeca rota, y sabré todo la moraleja que deja, cuando las personas están bien que bonito va la cosa, pero si tienes una complicación ya cambia la situación, mira ahora esto, miras lo otro etc…

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